El pago digital va en aumento: el 78% de los negocios ya ofrece a sus clientes diferentes métodos, frente al 66% de 2022, y Bizum es el que más crece. Esta plataforma se ha convertido en un medio de pago cada vez más habitual entre autónomos y empresas. Usar Bizum como forma de pago en un negocio es sencillo y es perfectamente posible desde el punto de vista fiscal, siempre que se tengan en cuenta algunas recomendaciones.

Utilizar Bizum como método de pago para autónomos es completamente legal, tanto como posibilitar el pago mediante tarjeta de crédito o transferencia. Sin embargo, la apariencia de informalidad de este medio de pago, que surgió para la transferencia de dinero entre particulares, no debe dar lugar a error, ya que por el hecho de utilizarlo no varían las obligaciones tributarias y contables de los autónomos y empresas quelo usan, como por ejemplo la obligatoriedad de emitir facturas en determinados casos o de declarar el IVA o el IRPF.

Además, la Agencia Tributaria cada vez vigila más los movimientos bancarios, y cada vez es mayor el riesgo de ser objeto de una inspección: las entidades bancarias tienen la obligación de informar a Hacienda de las transferencias, ingresos o retiradas de dinero de un importe elevado o que se realizan de forma repetitiva, ya que pueden ser un indicio de fraude fiscal y blanqueo de capitales.

Cómo utilizar Bizum como medio de pago de un negocio

Para poder recibir pagos a través de Bizum por tus productos o servicios la propia plataforma indica que “el autónomo deberá ponerse en contacto con su banco para la contratación de este servicio». Esto es así porque es necesario haber contratado con el banco la opción de comercio electrónico, que permite hacer uso de una TPV virtual, como sucede con las tiendas online.

Bizum ofrece tres opciones para que los clientes puedan pagar sus compras a través de este sistema: en comercios online puede añadirse como medio de pago, y en establecimientos físicos puede ofrecerse al cliente la posibilidad de escanear un código QR y aceptar el pago, o de enviarle una solicitud de pago a través de su número de teléfono para que la acepte.

Aunque Bizum establece para los particulares ciertos límites en el número y cantidad de pagos que se pueden recibir tanto diaria como mensualmente, utilizar Bizum como autónomo o empresa no está condicionado a estas limitaciones.

Sea cual sea la opción escogida, lo que no varía es que las obligaciones de las empresas y autónomosson las mismas independientemente de los métodos de pago que ofrezcan a sus clientes, por lo que las circunstancias que obligan a emitir factura son las mismas que si se utilizan formas de pago tradicionales, y esos ingresos deben declararse y están sujetos al pago de impuestos como el IVA o el IRPF.

Un detalle importante es que si ya utilizamos Bizum para uso privado habrá que diferenciar esas operaciones personales de las que corresponden al negocio, por lo que es recomendable utilizar cuentas bancarias diferentes para uno y otro fin.

Aunque los autónomos no tienen la obligación de contar con una cuenta bancaria para su actividad profesional, como sí ocurre con las empresas, una opción es utilizar una cuenta diferente para las operaciones relacionadas con la actividad profesional, de modo que no haya confusión posible y que en caso de que la Agencia Tributaria realice una comprobación no existan dudas de qué pagos recibidos son ingresos vinculados al negocio.

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